Como profesor de inglés, estoy deseando el fin del curso. Estoy cansado y seguramente mis alumnos están cansados de mi. Sin embargo, como alumno del curso de agricultura ecológica me siento un poco nostálgico sobre este último día. Aunque sí estoy cansado y tengo ganas de reclamar los sábados por la mañana para otras actividades que no sean ir a Sanlucar, también voy a sentirme un poco perdido ya que disfruto aprendiendo y aún más cuando el aprendizaje transcurre en el exterior y el fruto de mi trabajo lo llevo a casa para convertirlo en algo comestible. En fin, menos mal que las vacaciones vienen ya y me darán algo para distraerme un poco.
En esta última clase hemos visto cómo garantizar la pureza de nuestras semillas. No sé si algunos conservadores aprobaría las técnicas de fertilización in-vitro, pero para asegurar que la fertilización de la hembra es del macho de la misma planta hay que utilizar una técnica muy sofisticada.
Primero, la noche anterior hay que poner fiso alrededor de las flores de la plantas, tanto machos como hembras, que crees que van a abrir el dia siguiente. De esta manera no se contaminan por el polen de otras variedades. El día siguiente cortas la flores de los machos y les quitas los pétalos, dejando al desnudo su estambre. Con las hembras hay que quitar el fiso con cuidado, meter un par de estambres (3) dentro de la flor para fertilizar el ovario y después cerrar con fiso la flor otra vez. Si se queda fertilizado la flor ya empezará a formar la fruta. Si no se pudrirá y se caerá al suelo. Debes marca estas flores con una cinta para saber que son las frutas que hay que conservar para semillas.
Esta técnica solamente tiene sentido si quieres asegurar que las semillas que colectas de la fruta son puras y no se han hibridada con otras variedades, que es bastante común con las cucurbitáceas. Si vas a comprar las semillas nuevas todos los años no importa tanto.
Otra cosa que aprendimos era cómo podar a las cucrbitáceas que se extienden tanto, como las sandias y calabazas. Fernando dice que ellos no practican la poda porque es una técnica para sacar más bien frutas grandes y si el tamaño no importa no hay que hacerlo. De todos modos, la manera de hacerla es buscar primero los 2 primeros ramos que salen de la planta y quitar los demás. De cada ramo hay que buscar los primeros tres ramos que salen de ello y cortar el ramo prinicpal después del tercero. Si se hace esto sucesivamente, siempre cortando los ramos que salen después de la tercera, se consiguirá una planta bien podada y una fruta bien de tamaño.
La última cosa que vimos era como sacar semillas de una planta seca que se echado a flor, como una lechuga. Lo más fácil es coger una bolsa de plástico, meter la planta dentro y sucudirla bien. Se pone las semillas en un cubo y después, para quitar las impurezas, se puede utilizar un ventilador y, tirando las semillas arriba, las impurezas se van con el viento y a final lo que se queda en el cubo son las semillas puras y duras. Si tiene pulmones fuertes se pueden valer en vez del ventilador.
¡Buena suerte!
